Durante esta sesión se utilizan aceites esenciales que se centran en zonas específicas y sensibles del cuerpo, a elegir. El tipo de presiones y las técnicas a privilegiar son también libres.

Esta sesión favorece el reenfoque y la liberación emocional, por lo que se recomienda para marcar una pausa en un período de estrés y presiones diarias. Permite reconectar con el cuerpo y los sentimientos, y recuperar una energía vital satisfactoria.

Esta práctica combina el tacto benévolo con el poder de las vibraciones sonoras. El masaje tiene como objetivo liberar las tensiones físicas mientras el sonido de los cuencos tibetanos, los cuencos de cristal, los gongs o las campanas resuena profundamente en las células. El objetivo es lograr una relajación profunda y una armonización energética.